Experiencias: el abrazo a un palo borracho centenario y sus saberes secretos
Durante un caluroso día de marzo, tres mujeres madre tierra y éste ser, nos aventuramos de la mano de una de ellas* y convicciones compartidas, para encontrarnos con el abrazo sin tiempos de un Palo Borracho de más de cuatrocientos años o quizás quinientos.
Es que estamos soñando los primeros corredores bioculturales de la Villa y en esa búsqueda, abrazar y escuchar a borracho era algo entre alucinante e increíble. Pero fuimos no solo bienvenidos, más, sorprendidos por su presencia serena y misteriosa. Luego de caminar durante algún tiempo impreciso por el monte y otros sectores casi imposibles de penetrar y con cierto secreto necesario, para amurallar de cobardes semejante tesoro de Pachamama, allí está, majestuoso, sabio, miles de historias en su ser cargado de energías casi desconocidas para estos cuatro humanos.
Gracias a la Ordenanza** recientemente sancionada, de preservación del patrimonio cultural, ambiental, histórico y arquitectónico de la villa, estamos como esculpiendo el imaginario territorializado de los cuatro o cinco corredores bioculturales. En esta marcha de recuperación de historias, aparecen las ruinas quizás de una Estancia Jesuita, de un puertito ganadero, los tres cementerios, desde el Convento de las primeras hermanas Franciscanas de Gante de mediados del Siglo XIX cuando la villa nacía, y la selva en galería sobre el borde costero con sus milagrosas historias de mares y originarios seres que la habitaron milenariamente, hoy declarada en su valle de inundación, Área Natural Protegida del Paraná Medio.
Intentando conversar con el Palo Borracho, ser tan bienvenidos, escucharlo en esta devastadora crisis ambiental, de civilización, fue de una ternura indescriptible, como imposible de narrar, solo hacer silencio y sentirnos bendecidos por su presencia, por su ser milagroso, por su refugio de abejas y colibríes, por sus flores de siglos, por su mensaje sobre la quietud, la contemplación y las resistencias.
De alguna manera, con su lenguaje nos provoca y demanda, paremos la marcha ilimitada de las chimeneas, paremos el ritmo delirante de los combustibles fósiles, escuchemos las conchas marinas que estamos levantando sobre las barrancas y miremos al futuro abrazados a los raises de las esperanzas de este misterio de madre tierra, siendo ella, siendo tiempos de naturaleza y no esta realidad de voraces tiempos sin sentidos de vida, sin futuros.
El palo borracho, es un manifiesto de la vida, un mensaje de transitar hacia un ejercicio meditado de una ética para la sustentabilidad de los reinos de vida.
Nunca olvidaré este día, nunca te dejaremos de acompañar Palo Borracho madre tierra.
Jorge Daneri
Notas al pie. *concejales Silvia Klocker, María Esther Figueroa. Y Nancy Girard, enamorada de estudios históricos, arqueológicos y paleontológicos en los territorios de sus vivencias familiares desde la radicación de su familia a mediados del Siglo XIX. **Ordenanza 0227/Dic. 2022 creación del programa de Preservación Cultural, Ambiental, Histórico, Monumental, Arquitectónico-Urbanístico, Arqueológico-Paleontológico y Geológico en el ejido.
Fuente: Criterio Digital
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