¿Cómo es el ruido de los ríos pavimentados?
Últimamente, en Buenos Aires, han aparecido numerosos carteles y grafitis con representaciones de olas celestes que indican presencia de arroyos entubados. El Taller de grabaciones de campo y mapa sonoro (TGCMS), se encargó de registrar y analizar los sonidos de estos arroyos ocultos. Aunque ya no son visibles, ¿se pueden percibir auditivamente?
Este proyecto busca reflexionar sobre la influencia del entorno sonoro en nuestras ciudades altamente urbanizadas, explorando conceptos como el rugido de un ecosistema conquistado, la posnaturaleza, los humedales, el ruido blanco y la búsqueda de la utopía del silencio. Esta iniciativa forma parte de la comunidad del II Congreso Internacional de Arte + Ciencia “Las aguas”, organizada por el Centro de Arte y Ciencia de la Escuela de Arte y Patrimonio de la UNSAM.
Cierto, resulta peculiar mapear el sonido de lo que está ausente a simple vista. En este caso, se trata de explorar lo imperceptible en la vida urbana, centrándose en los sonidos de arroyos entubados que, aunque no son visibles, forman parte del entorno acústico de la ciudad.
¿Cómo sería el sonido de un río que no suena como tal? El agua, esencial para la vida, es tan crucial que Buenos Aires, a pesar de su proximidad al río, se destaca por ignorarlo. La ciudad ha relegado al inframundo a sus arroyos, como Maldonado, Ugarteche, Vega, Medrano y Cildáñez, que serpenteaban por el suelo porteño pero ahora están entubados, ocultos a la vista.
“En el Taller de grabaciones de campo y mapas sonoros (TGCMS) nos propusimos localizar, escuchar, grabar, editar y mapear de manera colectiva, circular e interdisciplinar los territorios que habitamos y transitamos, con un eje en común. Nos preguntamos por el agua en Buenos Aires (Argentina) y en La Paz (Bolivia), en nuestros barrios y paisajes. En un ejercicio de imaginación sonora salimos con nuestros grabadores profesionales y hasta con celulares. Orientamos la exploración en los cruces, nos paramos entre los cursos de agua y el modo de habitar de las personas en los espacios comunes, en los surcos. El recorrido inspiró preguntas, disparó certidumbres, nos permitió acceder a ese borde que está latiendo, que está viviendo cerca nuestro. Aguas abajo, Mapa Sonoro de Arroyos Urbanos censa el reflejo del ambiente acústico en nuestras ciudades hiperurbanizadas, censa el perfume y el rugido del ecosistema conquistado. Documenta las cuencas hídricas invisibles de la ciudad de Buenos Aires. Habla de posnaturaleza y de ecología del paisaje”.
Fuente: Anfibia
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