La aprobación del trigo transgénico: otra violación del Acuerdo Regional de Escazú

La organización Naturaleza de Derechos, accedió al acta de la Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria (CONABIA), órgano técnico consultor que emite su opinión sobre la seguridad ambiental dentro del proceso administrativo de aprobación de los órganos vegetales modificados genéticamente (OVGM) en la Argentina, por la cual 11 miembros de los 42 que la integran en materia vegetal, aprobaron el documento decisión sobre la liberación comercial del Trigo Transgénico HB4 de la empresa INDEAR S.A., el 31 de Marzo de 2016.D

En una escueta esquela del acta de reunión, los miembros de la CONABIA que aprobaron el Trigo Transgénico señalaron: “En base a la evidencia disponible (sic) la Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria y la Dirección de Biotecnología recomiendan dar por concluida satisfactoriamente la evaluación de la Segunda Fase de Trigo (Triticum aestivum L.) con el evento IND-00412-7 (OCDE), atendiendo a que los riesgos de bioseguridad derivados de la liberación de este OVGM en el agroecosistema, en cultivo a gran escala, no son significativamente diferentes a los inherentes al cultivo de trigo no genéticamente modificado, conforme lo expresa el Documento de Decisión oportunamente producido. Los miembros presentes dan acuerdo y suscriben el citado documento, para su consideración por el Sr. Secretario de Agregado de Valor.”

Acta de la CONABIA sobre el Trigo Transgénico:
https://drive.google.com/file/d/1uVi78yEe1_nWK8eK40TcKeEcs2FRE-zX/view?usp=sharing

Se trata de un documento que hasta hace días atrás era inaccesible. De el surgen las personas que con su firman recomendaron la aprobación de la liberación comercial del Trigo Transgénico HB4 en la Argentina, a saber:
Silvia Lede (CONICET)
Guillermo Mentruyt (Asociación de Semilleros Argentinos – ASA)
Silvia Passalaqcua (SENASA)
Elba Pagano (INTA)
Alejandro Tozzini (Asociación de Semilleros Argentinos – ASA)
Borjn Welin (Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres)
Ana Laura Vicario (INASE)
Ricardo Fernandez de Ullivarri (Chacra Santa Rosa)
Mónica Pequeño Araujo (INASE)
Carlos Alberto Cattaneo (Secretaria de Ambiente de la Nación)
Claudio Robredo (Chacra Santa Rosa)

De los 11 miembros, 8 tienen fuertes vínculos del agronegocio conocidos o bien directamente son el agronegocio auto-regulándose dentro de la misma esfera estatal, para liberar productos del sector agroindustrial con alto impacto ambiental, alimentario y en la biodiversidad, sin el control ciudadano, en abierta violación del Acuerdo Regional de Escazú, y sobre los cuales está demostrado su insostenibilidad ambiental.

Los miembros de la CONABIA con graves conflictos de intereses son:

  • Guillermo Mentruyt (Asociación de Semilleros Argentinos).
    Gerente de Asuntos regulatorios de Corteva Agroscience (2017-2022), Dow Agrosciences (1992-2014). También presidente de Argenbio, Consejo Argentino para la Información y el Desarrollo de la Biotecnología creado por las transnacionales Bayer, Basf, Syngenta y Corteva. Mientras fue miembro de la CONABIA entre Mayo 2006 y Julio 2017 su empresa Dow se vio beneficiada con el visto bueno de dicho organismo en las aprobaciones comerciales de las variedades transgénicas de Maíz 1507xNK603 (2008), MON89034xTC1507xNK603 (2012), MON-89034-3 x DAS-01507-1 x MON-00603-6 x SYN-IR162-5 (2016) y de Soja 2,4-D DAS-44406-6 (2015) y DAS-81419-2 x DAS-444Ø6-6 – DAS-81419-2 (2016)
  • Alejandro Tozzini (Asociación de Semilleros Argentinos)
    Gerente de Asuntos Regulatorios de la empresa Syngenta entre los años 2007 y 2017. También un declarado antimapuche en expresiones racistas en las redes sociales.
  • Borjn Welin (Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres)
    Investigador que colabora con la Transnacional de SummitAgro S.A. La Estación Experimental Obispo Colombres a la que pertenece es la que procura la aprobación comercial de la Caña Transgénica TUC-873RH-7, que ya tiene el visto de la CONABIA, órgano que la integra.
    https://magyp.gob.ar/sitio/areas/biotecnologia/conabia/_pdf_dd/DOC%20DEC%20TUC-873RH-7%20V1%20versi%C3%B3n%20final%20firmado%2017-09-15.pdf
  • Silvia Lede (CONICET)
    Con un vínculo histórico con Bioceres, empresa desarrolladora del Trigo HB4. En el 2004 formó parte de un equipo de desarrollo biotecnológico de Bioceres que trabajó la transformación genética de la soja con genes antifúngicos mediante un convenio suscripto con la Fundación de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.
  • Silvia Passalaqcua (SENASA)
    Funcionaria pro-transgénica que aparece en conferencias a favor de los OGM organizadas y financiadas por Bayer.
  • Ana Laura Vicario (INASE)
    Funcionaria pro-transgénica con colaboraciónes en documentos de Argenbio, institución privada de las empresas transnacionales Bayer, Basf, Syngenta y Corteva.
  • Ricardo Fernandez de Ullivarri y Claudio Robredo pertenecen a Chacra Santa Rosa, institución privada pro-transgénica interesada en la aprobación del evento biotecnológico TUC-873RH-7 en la Caña de Azúcar.

El acta de la CONABIA sobre el trigo transgénico es una muestra cabal de cómo se aprueban los OGM en la Argentina, a través de un órgano cuyos miembros presentan fuertes conflictos de intereses para avalar – a puertas cerradas – la liberación de productos que representan un riesgo de daño irreparable a la diversidad genética y no cuentan con los adecuados estudios y ensayos que aseguren la inocuidad alimentaria de los ogm, la que se basa en argumentos meramente dogmáticos.

En el año 2013, Naturaleza de Derechos, denunció ante la Justicia Federal (1) el funcionamiento abiertamente irregular de la COMISIÓN NACIONAL ASESORA DE BIOTECNOLOGÍA AGROPECUARIA (CONABIA) órgano técnico consultor que emite su opinión sobre la seguridad ambiental dentro del proceso administrativo de aprobación de los órganos vegetales modificados genéticamente (OVGM) en la Argentina.

Efectivamente en ocasión del juicio contra la transnacional Monsanto (hoy Bayer-Monsanto) por la liberación de la Soja Transgénica Intacta, la justicia hizo lugar a una diligencia preliminar ordenando al Ministerio de Agricultura de la Nación a que remitiera al expediente judicial todos los antecedentes administrativos del ogm en cuestión.

Fue así como se pudo acceder a las actuaciones administrativa completas de la Soja Intacta y comprobar un largo derrotero de irregularidades. Varias de ellas relacionadas con el funcionamiento de la CONABIA, comprobándose que dicho órgano colectivo operó durante más de 20 años sin un reglamento interno. En el caso de la Soja Intacta, el acta también fue firmada por 11 miembros de la CONABIA sobre un cuerpo colectivo que cuenta con 49 miembros-
Originalmente la resolución que diera origen a la CONABIA (Res. SAGyP Nro 124/91 – art. 2 inc. D) -) había puesto a cargo de la misma, el dictado de su reglamento interno. Sin embargo ello no ocurrió nunca.

A raíz de esa denuncia judicial de Naturaleza de Derechos, el Ministerio de Agricultura de la Nación dictó la Resolución 10/2013 dictando el primer reglamento de funcionamiento de la CONABIA.

No obstante, y tal como se denunciara en su momento, la Resolución 10/2013 está impregnada de un compendio de imprecisiones y vaguedades. Así por ejemplo respecto al quórum necesario para el inicio de los debates donde se deciden las aprobaciones de los OVGM, el artículo 12 del reglamento señala que la CONABIA podrá sesionar con la presencia de por los menos 5 integrantes, cuando la totalidad miembros actuales especializados en Biotecnología Vegetal y Microorganismos asciende a 42 de total de 49 (sic).

LA DEMOCRACIA DE LA CONABIA SEGÚN EL AGRONEGOCIO

Para las aprobaciones, el reglamento señala que las decisiones se adoptaran por mayoría simple de votos y no sobre la totalidad de miembros, requiriendo que en esa mayoría simple obligatoriamente este comprendida mínimamente por 2 votos del INTA o INASE, 1 voto de una institución Pública y Externa a la órbita del Ministerio de Agricultura, y 2 votos de instituciones miembros diferentes entre si. Conforme a ello, y de acuerdo a los arts. 12 y 18 del Reglamento interno de la CONABIA, para las aprobaciones de los OVGM bastaría sumar al quórum un representante más del SENASA y/o INASE y aquellas podrían obtenerse solo con cinco votos, siendo que el total de integrantes de la CONABIA son 49 (42 especializados en Biotecnología Vegetal y Microorganismos.).

A partir de la reglamentación de la CONABIA, el resultado de la votación sobre las decisiones del órgano colectivo deberá reflejarse en el acta, explicitando las Instituciones Miembro que apoyaron cada una de las opciones consideradas, y los argumentos presentados en sustento de las alternativas que no correspondieran a la decisión mayoritaria.

Algo de lo que el acta de la CONABIA sobre el Trigo Transgénico no da cuenta.


(1) Causa “CABALEIRO LUIS FERNANDO C/ EN-M§ AGRICULTURA Y GANADERIA-SAG Y P Y OTRO S/PROCESO DE CONOCIMIENTO”. Actualmente en la Corte Suprema de Justicia de la Nación.